Los
musulmanes y las musulmanas no son una excepción a esta realidad
actual, tenemos varias parejas de casados que se conocieron a través
del Internet.
Y es que con la escasa
cantidad de musulmanes en sociedades como por ejemplo las de
Latinoamérica,
muchos hermanos y muchas hermanas, en especial conversos, encuentran
difícil el conocer a alguien en su propia comunidad con quien
poderse casar, sin embargo, a través de la red pues las
posibilidades se incrementan. Sin embargo, para quienes opten o estén
viviendo este tipo de situaciones, es importante y necesario recordar
los Parámetros
Islámicos
al conocer a alguien para casarse, estos deben ser considerados tanto
al conocer a alguien en persona o por Internet:
- No hablar ni estar a solas.
- Limitar la conversación a
asuntos permitidos, por ejemplo hablar de asuntos que consideren
importantes conocer para poder determinar si quieren o no casarse, si
son o no compatibles.
- Evitar palabras o
conversaciones de tipo amoroso o romántico (reservar eso para el
Matrimonio).
- No tener ningún tipo de
contacto físico: besos, abrazos, intimidad. En este punto me
gustaría aclarar, que muchas personas piensan que como no hay forma
de que puedan tocarse por Internet,
no incurren en esta falta, sin embargo, cuando se envían besos o
abrazos virtuales, o peor aun lo que se conoce hoy en día como
“Cybersexo”,
ciertamente es una forma de caer en una conducta virtual inapropiada
para personas que aún no está casada.
Ahora bien, lo mejor sería
cuando uno busca casarse, empezar la búsqueda dentro de la misma
comunidad musulmana local o al menos la más cercana, en el caso de
las hermanas, designando a un Walî
(tutor, guardián) que les facilite esta tarea, pues el Internet,
presenta muchos más riesgos y desventajas, por lo que la primera
opción debería ser buscar por la forma tradicional, pero si a pesar
de todo las cosas no se dan, entonces la vía del Internet
debe ser empleada con mucho cuidado y siempre teniendo en cuenta los
Parámetros
Islámicos
mencionados anteriormente.
Señales de Alerta al
Conocer al Futuro Esposo por Internet
Una
vez más, me gustaría enfatizar que lo mejor al momento de buscar
casarse es seguir la forma tradicional, designar a un Walî
que facilite la búsqueda de un hombre musulmán adecuado dentro de
la misma comunidad musulmana local o cercana, pero si te vez en la
situación de conocer al futuro esposo por Internet,
voy a continuación mencionar algunas señales de alerta a las que
debes prestar mucha atención para no terminar en una situación
desafortunada.
-
Tiene muchas amigas, puedes notar que en su red social, por ejemplo
en su lista de contacto de Facebook
sus contactos son mayormente mujeres. Algunas veces estas mujeres que
forman parte de sus contactos tienen fotos bastante provocativas o le
dejan mensajes afectuosos en su muro.
-
Anda mucho en las redes sociales, tiene más de una cuenta de
Facebook.
O está constantemente cambiando su cuenta.
-
Le encanta tomarse muchas fotos solo, es como si estuviera posando o
modelando para las chicas.
-
No conoces sus amistades ni familia y tiene excusas para no
presentártelos.
-
No conoces muchos detalles específicos de su vida, no conoces su
verdadero nombre, te habla aún con un seudónimo o apodo.
-
No habla mucho de sí mismo.
-
Te pide que le envíes dinero.
-
Tiene urgencia por emigrar a tu país.
-
No tiene interés en conocer a tu familia, peor aún de hablar con tu
Walî.
-
Tú tienes que el esfuerzo por ir a su país para conocerlo y
casarse, pero él no está dispuesto a hacer ni el intento de venir
al tuyo. Tú tienes que hacer todo el esfuerzo para hacer que la
relación funcione pero él no pone de su parte o no está dispuesto
a sacrificar nada para ello.
-
Te ves a ti misma más pendiente de contactarlo, pero él te contacta
muy poco o siempre espera que seas tú quien lo busques.
-
En ocasiones se desaparece por ciertos periodos de tiempo sin mucha
explicación o reaparece dando explicaciones increíbles.
-
Te pide que le muestre contenido explícito sexual: fotos o
video-llamadas
atrevidas.
-
Tiene apuro por verte por cámara o cómo luces en fotos. Sin
embargo, él difícilmente te comparte alguna de sus fotos recientes
o tiene excusas para no dejarse ver por video-llamada.
-
Habla mucho de planes y sueños a futuro pero hasta ahora no ha hecho
absolutamente nada para empezar a realizarlos, se queda en meras
palabras sin hechos.
-
Utiliza muchas frases románticas o parece el hombre más romántico
del mundo.
-
Parece olvidar con facilidad cierta información que ya has
compartido más de una vez con él.
-
Notas que se contradice en la información que te da, o hasta notas
que en más de una ocasión ha mentido.
-
No habla mucho de religión contigo.
-
No te saluda con el Salam,
no se expresa como una persona musulmana.
-
Te das cuenta que pasa mucho tiempo en la computadora y cuando le
preguntas por un día normal en su vida, no menciona cuando hace el
Salât
o no lo ves dejar su computadora cuando el momento de la oración
llega.
-
Te proponen casarse a escondidas.
-
Se ponen como invisibles cuando hablan contigo.
Si
has notado estas señales en la persona que estás conociendo para
casarte, es mejor que te asegures bien si es quien dice ser, que se
contacte inmediatamente por Teléfono
o Internet
con tu Walî
para ayudarte con esta tarea, averigua también sobre su familia,
¿por qué no le ha dicho a tu familia sobre ti? ¿Será que ya está
casado o comprometido con alguien más?, ¿será que no quiere nada
serio contigo realmente? No te dejes llevar por palabras, el
Matrimonio
es un asunto serio y requiere de personas serias y sinceras, averigua
bien y ten cuidado de a quién conoces por Internet.
Recomendaciones cuando
el Futuro Esposo es Extranjero
Muchas de las personas que se
conocen por Internet
y logran concretar su Matrimonio
usualmente son de diferentes países. El casarse con alguien de otro
país y cultura ciertamente representa un desafío, posible de
sobrellevar para unos pero no para otros. Por ello, a continuación
algunas recomendaciones y consideraciones a tener en cuanta cuando te
casas con un musulmán extranjero.
1.
Considera los antecedentes culturales de la persona con la que te vas
a casar. ¿Es esa cultura muy diferente de la tuya? ¿Estás
familiarizado con la cultura de tu futura pareja? ¿Ha pasado tu
pareja algo de tiempo en tu país o en otro lugar del extranjero
similar? ¿Existen otras personas de la cultura de tu pareja viviendo
en tu ciudad o vecindario? ¿Está él preparado para el impacto
cultural de trasladarse a tu país o viceversa? ¿Estás dispuesta a
vivir en su país si se sintiera incómodo aquí o viceversa?
2.
Considera cuán bien se conocen. ¿Realmente se conocen lo suficiente
para determinar que se quieren casar el uno con el otro? ¿Es él
quien dice ser? Si no te sientes segura al respecto, entonces debes
considerar darte más tiempo antes de tomar una decisión tan seria.
Recuerda hacer tu Salatul
Istikhara
(la oración de la consulta a Allah
(SWT)).
3.
Investiga los problema de inmigración correspondientes. ¿Ya está
tu futura pareja viviendo aquí con un visado o necesitarás traerla
aquí con una visa? Si este último es el caso, entonces ¿le
resultará difícil para tu futura pareja conseguir una visa? Esto
varía de forma significativa dependiendo del país del que venga. Si
no puedes encontrar todas las respuestas que necesitas, tal vez sea
mejor consultar con un abogado de inmigración. Igualmente aplica
estas preguntas viceversa, si fueras tú quien va a vivir al país de
él.
4.
¿Cuál es la situación económica de tu pareja? ¿Será capaz de
trabajar aquí? Si no es así, ¿puedes mantenerla hasta que pueda?
Esta no es sólo una preocupación práctica para ti, pero si tienes
que mantenerla entonces debes estar preparada para demostrar eso al
gobierno para que tu futura pareja consiga una visa. También debes
ser claro sobre si tu pareja espera que la ayudes económicamente
para traer a otros miembros de su familia. Esto también suele ser un
punto de disputa en el matrimonio.
5.
Considera la compatibilidad lingüística con tu pareja. ¿Habla al
menos alguno de los dos el otro idioma bien? ¿Estarías dispuesto a
aprender su idioma? ¿Estaría él dispuesto a aprender tu idioma?
Este es un problema tanto práctico como cultural. La incapacidad de
comunicarse de forma efectiva puede dañar tu relación seriamente
así como también el dificultar el establecimiento en el nuevo país.
Además, aprender el idioma de del uno y el otro, les ayudará a
sentirse más cómodos en su matrimonio y les facilitará la relación
con su familia política. Siempre debes recordar que puede ser una
experiencia muy traumática irse a vivir a otro país, peor aun
cuando no se entiende nada de lo que la gente dice.
6.
Ten un plan en caso que las cosas no marchen bien, como dejarías su
país o cual sería la situación legal de tu pareja en tu país si
se divorcian. Es mejor prevenir que lamentar
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