PREGUNTAS SOBRE EL MAL DE OJO

A‘udu Billâhi Min as-Saitâni Rayîm

Bismillâhi ar-Rahmâni ar-Rahîm

He recibido un mensaje de una hermana que me hace tres preguntas sobre el Mal de Ojo, a raíz de una publicación en mi pagina de Facebook.

- ¿Cuáles son los signos del Mal de Ojo?

- ¿Cómo podría saber si esta afectada por el Mal de Ojo?

- ¿Cuales son las Suras y Aleyas que se recitan contra el Mal de Ojo?

Ante todo quiero dar las gracias por vuestro interés siguiendo mis publicaciones, y lo menos que tengo que hacer es ser agradecido y contestar a vuestras preguntas, siempre que tenga la respuesta para ello.

Tengo que decir que yo no soy Imâm, ni Sabio, ni Sheij, ni Erudito. Tan solo soy una persona, que por estar prejubilado, tengo mucho tiempo libre y lo dedico al estudio del Islam. Trato de seguir El Coran, la Sunnah del Profeta Muhammad (Salallahu Alaihi Wa Salam), los Ahadîz y utilizo el Tafsîr de Al-Qurtubî.

Alabado sea Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala).

Le pido a Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) que beneficie a los lectores.

Aquellos que tratan con Ruqiah (Invocación) como está prescrita en el Islam han mencionado algunos de los síntomas por los cuales se puede saber si una persona ha sido poseída por los Genios (Yînn) o afectada por el Mal de Ojo. No son síntomas definitivos y pueden variar en algunos casos, y pueden ser más o menos en otros casos.

En cuanto a los Síntomas de Posesión, son:

1.- Dar la espalda y reaccionar con fuerza al escuchar la Llamada a la Oración (Adhân) o El Corán.

2.- Desmayos, convulsiones y caídas cuando se le lee El Corán.

3.- Muchos sueños perturbadores.

4.- Estar solo, mantenerse alejado de las personas y comportarse de forma extraña.

5.- El Demonio (Satanás) que lo posee puede hablar cuando se recita El Corán sobre él.

En cuanto a los síntomas de estar afectado por el Mal de Ojo, el Sheij ‘Abd al-‘Aziz as-Sadhan (que Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) lo proteja) dijo: Si no es una enfermedad real, entonces los síntomas pueden tomar las siguientes formas: Dolores de cabeza que se mueven de una parte de la cabeza a otra; palidez amarilla en la cara, sudar y orinar mucho, apetito débil, hormigueo, calor o frío en las extremidades, palpitaciones en el corazón, dolor en la espalda baja y en los hombros, tristeza y ansiedad, insomnio en la noche, reacciones fuertes debido a temores anormales, muchos eructos, bostezos y suspiros; retiro y amor a la soledad, apatía y pereza, una tendencia a dormir, problemas de salud sin causa médica conocida.

Estos signos o algunos de ellos pueden estar presentes de acuerdo con la fuerza del Mal de Ojo o la cantidad de personas que hacen Mal de Ojo en otros.

Se les consulta a los Eruditos del Comité Permanente: ¿Cuál es la definición del Mal de Ojo?

Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) dice en El Corán:

“Y del mal del envidioso cuando envidia”. (El Amanecer 113: 5)

¿Es Sahîh el Hadîz del Profeta (Salallahu Alaihi Wa Salam) en el que dice “Un tercio de aquellos que están en la Tumba (Lahd) están allí por el Mal de Ojo”? Si una persona piensa que alguien lo está envidiando, ¿qué deberá hacer y decir el Musulmán (Muslim)? Si una persona que le eche el Mal de Ojo a alguien se lava a si mismo, ¿debe llevar a su victima el agua que usa para la sanación? ¿Y él debe tomar el agua o lavarse a si mismo con ella?

Ellos respondieron: La palabra árabe Al-‘Ayn (traducida como el Mal de Ojo) se refiere a cuando una persona da a otra con su ojo. Comienza cuando a una persona le gusta algo y luego sus sentimientos lo afectan a través de la mirada repetida hacia el objeto de sus celos. Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) le encomendó a su Profeta Muhammad (Salallahu Alaihi Wa Salam) buscar refugio en Él del que envidia, como dijo en El Corán:

“Y del mal del envidioso cuando envidia”. (El Amanecer 113: 5)

Todo aquel que le transmita el Mal de Ojo a otro es envidioso, pero no toda persona que envidia le transmite el Mal de Ojo) a otro. La palabra Ha’sid (el que envidia) es más general en significado que la palabra ‘Ayn (el que le transmite el mal de ojo a otro), entonces la búsqueda del refugio en Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) de aquel que envidia incluye la búsqueda del refugio en Él de aquel que le transmite el Mal de Ojo a otro. El Mal de Ojo es como una flecha que viene del alma de aquel que envidia y de aquel que le transmite el Mal de Ojo a otro y va hacia aquel que es envidiado y hacia aquel a quien se le ha echado el Mal de Ojo; algunas veces lo golpea y otras veces falla. Si el objetivo está expuesto y desprotegido, lo afectará, pero si el objetivo es cauteloso y está armado, la flecha no tendrá ningún efecto y puede volver a aquel que la lanzó. (Del libro Zaad al-Ma’aad del Imâm Ibn al-Qayyim)

Hay Ahadîz del Profeta (Salallahu Alaihi Wa Salam) que hablan de los efectos del Mal de Ojo. Por ejemplo, está narrado en As-Sahaahayn que ‘Â’isha (que Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) esté complacido con ella) dijo: El Mensajero de Al-lâh (Salallahu Alaihi Wa Salam) solía decirme que recitara Ruqiah para protegerme del Mal de Ojo.

Muslim, Ahmad y At-Tirmidî narraron de Ibn ‘Abbas (que Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) se complazca de él) que el Profeta (Salallahu Alaihi Wa Salam) dijo: “El Mal de Ojo es real y si algo fuera a superar al Decreto Divino (Qadr), seria el Mal de Ojo. Cuando se le pide que tome un baño (para proveer la cura) para la influencia del Mal de Ojo, debe tomar un baño”. (Esto fue clasificado como Sahîh por At-Tirmidî, y también por Al-Albani en As-Silsilah as-Sahihah, 1251)

El Imâm Ahmad y At-Tirmidî (2059, donde lo clasificó como Sahîh) narraron que Asma’ bint ‘Umays dijo: “Oh Mensajero de Al-lâh (Salallahu Alaihi Wa Salam), los hijos de Ya’far han sido afligidos por el Mal de Ojo, ¿debemos recitar Ruqiah por ellos?”. Él (Salallahu Alaihi Wa Salam) dijo: “si, porque si algo fuera a superar el Decreto Divino (Qadr), sería el Mal de Ojo”. (Clasificado como Sahîh por Al-Albani en Sahîh At-Tirmidhi)

Abû Dawûd narró que ‘Â’isha (que Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) esté complacido con ella) dijo: A la persona que le ha echado el Mal de Ojo a otro se le ordenará que haga la Ablución (Wudû), luego la persona que ha sido afligida se lavara a si misma (con esa agua). (Esto fue clasificado como Sahîh por Al-Albani en Sahîh Abû Dawûd)

El Imâm Ahmad (15550), Mâlik (1811), An-Nasâ‘i e Ibn Hiban narraron de Sahl ibn Hanif que el Profeta (Salallahu Alaihi Wa Salam) salió y viajó con él hacia Meca, hasta que se encontraban en el paso de la Montaña de Al-Jarar en Yuhfah. Allí Sahl ibn Hanif hizo el Baño Completo (Ghusl), y apareció apuesto y con una bella y tersa piel. ‘Aamir ibn Rabi’ah, uno de los Banû ‘Adiyy ibn Ka’b, lo miró mientras estaba haciendo el Baño Completo (Ghusl) y dijo: “Nunca he visto una piel tan hermosa, ni siquiera la piel de una virgen”, y Sahl cayó sobre la tierra. Fueron hacia el Mensajero de Al-lâh (Salallahu Alaihi Wa Salam) y dijeron: “Oh Mensajero de Al-lâh (Salallahu Alaihi Wa Salam), ¿puedes hacer algo por Sahl ya que por Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala), no puede levantar su cabeza?”. Él (Salallahu Alaihi Wa Salam) dijo “¿Acusas a alguien con respecto a eso?”. Ellos dijeron, “‘Aamir ibn Rabi’ah lo miró”. Entonces el Mensajero de Al-lâh (Salallahu Alaihi Wa Salam) llamó a ‘Aamir y lo reprendió fuertemente. Le dijo: “¿Por qué mataría uno de ustedes a su hermano? Si ven algo que les gusta, entonces recen por su bendición”. Luego le dijo: “Lavate a ti mismo por él”. Entonces él lavó su cara, sus manos, antebrazos, rodillas y los costados de sus pies, y adentro su Izaar (vestido interior) en su vasija. Luego esa agua fue vertida sobre él, y un hombre la vertió sobre su cabeza y espalda. Cuando le arrojaron esa agua a Sahl, se levantó y se unió a las personas como si nada malo le hubiera sucedido. (Clasificado como Sahîh por Al-Albani en el libro Al-Mishkaat, 4562)

La mayoría de los Eruditos tiene la visión de que la gente puede realmente ser afligida por el Mal de Ojo, en base a los Ahadîz citados anteriormente y otros, y gracias a los informes y a la evidencia que lo confirman.

Con respecto al Hadîz, “Un tercio de aquellos que están en la Tumba (Lahd) están allí por culpa del Mal de Ojo”, no sabemos cuán auténtico es, pero el autor de Nayl al-Awtaar dijo que Al-Bazar narró con un Isnâd Hasan de Yaabir (que Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) se complazca de él) que el Profeta (Salallahu Alaihi Wa Salam) dijo: “Muchos de aquellos que mueren entre mi Nación (Ummah) mueren a causa de la Voluntad y el Decreto Divino (Qadr) de Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala), y luego a causa del Mal de Ojo”.

El Musulmán (Muslim) tiene que protegerse a si mismo de los Demonios (Sayâtîn) y algunos seres humanos corruptos, teniendo sólida fe en Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala), poniendo su confianza en Él, buscando refugio en Él, rogándole, recitando los rezos para la protección narrados por medio del Profeta (Salallahu Alaihi Wa Salam)), recitando las dos últimas Suras de El Corán (Al-Mi‘wadhatain) Sura El Amanecer (Al-Falaq) n.º 113 y Sura Los Hombres (An-Nâs) n.º 114); Sura La Adoración Pura (Al-Ijlâs) n.º 112; Sura La Apertura (Al-Fâtihah) n.º 1 y la Aleya El Trono (Al-Kursi) (La Vaca 2: 255)).

Las Súplicas (Du‘â) para la protección incluyen las siguientes: 

- “A’udhu bi kalimaat-illaah il-taammati min sharri ma Jalaqa”.

(Busco refugio de la maldad de aquello que El ha creado en las palabras perfectas de Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala)).

- “A’udhu bi kalimaat-illaah il-taammati min ghadabihi wa ‘iqaabihi, wa min sharri ‘ibaadihi wa min hamazaat al-shayatini wa an yahdurun”.

(Busco refugio en las palabras perfectas de Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala); refugio de Su ira y castigo, de la maldad de Sus siervos, de las malas provocaciones de los Demonios (Sayâtîn) y de su presencia).

- Y uno puede recitar las siguientes palabras de Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala): 

“Pero, si te dan la espalda, di: ¡Me es suficiente con Al-lâh. No hay otra divinidad salvo Él. A Él me confío, y Él es el Señor del Trono inmenso!”. (El Arrepentimiento 9: 129)

“Hasbi Allaahu laa ilaaha illa huwa, ‘alayhi tawakkaltu wa huwa Rabb ul-‘arsh il-‘azim”. (El Arrepentimiento 9: 129)

Hay otras Súplicas (Du‘â) similares que están prescritos en la Sharî‘ah. Esto fue lo que quiso decir Ibn al-Qayyim en las palabras citadas al comienzo de esta respuesta.

Si se sabe o se sospecha que una persona ha sido afligida por el Mal de Ojo, entonces al que le echó el Mal de Ojo se le debe ordenar que se lave a si mismo por su hermano. Entonces se debe traer una vasija de agua, debe poner su mano en ella, y enjuagar su boca dentro de la vasija. Luego debe lavar su cara, poner su mano izquierda dentro de la vasija y lavar su rodilla derecha; luego debe poner su mano derecha en la vasija y lavar su rodilla izquierda. Luego debe lavar el interior de su vestido. A continuación, el agua debe ser vertida sobre la cabeza de aquel a quien se le echado el Mal de Ojo, vertiéndola por detrás de una sola vez. Así sera sanado, por la voluntad de Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala). (Fataawa al-Laynah ad-Daa’imah li’l-Buhuz al-‘Ilmiyyah wa’l-Ifta, 1/186)

Se le preguntó a Sheij Muhammad as-Saalih al-‘Uzaymin: ¿Puede el Mal de Ojo afectar a una persona? ¿Cómo se la debe tratar? ¿Estar en guardia se contradice con poner la confianza en Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala)?

El respondió: Nuestra opinión respecto al Mal de Ojo es que es real y que ha sido probado por las Enseñanzas Islámicas y por experiencias de la vida real. Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) dice en El Corán:

“Aquellos que se niegan a creer casi te tumban con sus miradas, cuando oyen el Recuerdo, y dicen: Es un poseso. Sin embargo, no es sino un recuerdo para los mundos”. (El Cálamo 68: 51-52)

Ibn ‘Abbas y otros hicieron comentando sobre estas Aleyas: Esto significa que ellos le echaron el Mal de Ojo con sus miradas. El Profeta (Salallahu Alaihi Wa Salam) dijo: “El Mal de Ojo es real y si algo fuera a superar al Decreto Divino (Qadr), sería el Mal de Ojo. Cuando se le pide que tome un Baño (para proveer la cura) para la influencia del Mal de Ojo, debe tomar un Baño”. (Narrado por Muslim. An-Nasâ‘i e Ibn Mâŷah narraron que ‘Aamir ibn Rabi’ah pasó al lado de Sahl ibn Hanif cuando se estaba bañando... y citó el Hadîz.

La realidad lo confirma y no se puede negar.

En el momento en el que te veas afligido por el Mal de Ojo debe utilizar los tratamientos recomendados en la Sharî‘ah, que son:

1.- Recitar Ruqiah. El Profeta (Salallahu Alaihi Wa Salam) dijo: “No hay Ruqiah excepto en el caso de Mal de Ojo o fiebre”. At-Tirmidî, 2057; Abû Dawûd, 3884. Ŷibrîl (Gabriel) solía hacer Ruqiah para el Profeta (Salallahu Alaihi Wa Salam) y decir:

“Bismillaahi arqika min kulli shay’in yu’dhika, min sharri kulli nafsin aw ‘aynin haasid Allaahu yashfik, bismillaahi arqik”.

(En el nombre de Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) yo realizo Ruqiah para ti, para la protección de todo lo que te lastima de la maldad de cada alma, para que Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) te sane del Ojo Envidioso, en el nombre de Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) yo realizo Ruqiah para ti)

2.- Pedirle a la persona que le ha echado el Mal de Ojo a otro que se lave, como el Profeta (Salallahu Alaihi Wa Salam) le encomendó a ‘Aamir ibn Rabi’ah que hiciera lo del Hadîz citado anteriormente. Luego el agua debe ser vertida sobre aquel que ha sido afligido.

Con respecto a tomar su desperdicio, tal como su orina y sus deposiciones, no hay base para hacerlo; lo mismo se aplica al hecho de tomar algunas de sus pertenencias. En su lugar, lo que se narra es que lo que se menciona arriba, lavar sus miembros y el interior de su vestido, o algo similar como lavar dentro de su sombrero o sus prendas. Y Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) es quien más sabe.

No hay nada malo con tomar precauciones en contra del Mal de Ojo antes de que ocurra, y esto no contradice la idea de Tawakkul (depositar nuestra confianza en Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala)). De hecho esto es Tawakkul, porque Tawakkul significa poner nuestra confianza en Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) mientras implementamos los medios que han sido permitidos o encomendados. El Profeta (Salallahu Alaihi Wa Salam) solía buscar refugio para Al-Hasan y Al-Hussein y decir:

“U’idhukuma bi kalimaat Allaah al-taammati min kulli shaytaanin wa haammah wa min kulli ‘aynin laammah”.

(Busco refugio para ustedes en las palabras perfectas de Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala), de todo Demonio (Satanás) y de todo reptil venenoso, y de todo Mal de Ojo). (At-Tirmidî, 2060; Abû Dawûd, 4737)

Y decía: “Ibrâhîm (Abraham) solía buscar refugio en Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) para Ishâq (Isaac) e Ismâ‘îl (Ismael), la paz sea con ambos”. (Narrado por Al-Bujârî, 3371)

(Fataawa as-Sheij Ibn ‘Uthaymin, 2/117, 118)

¿Puede un hombre perjudicar a su hermosa mujer con el “Mal de Ojo”?

- En primer lugar: El “Mal de Ojo” es real, como dijo el Profeta (Salallahu Alaihi Wa Salam): “El Mal de Ojo es real y si alguna cosa fuera a sobrepasar a la Orden Divina (Qadr) sería el Mal de Ojo”. (Narrado por Muslim, 2188, del Hadîz de Ibn ‘Abbas; Al-Bujârî (5048) y Muslim (2187) narraron la primer parte de este Hadîz de Abû Huraira)

- En segundo lugar: Por lo general, el Mal de Ojo proviene de personas que son celosas o envidiosas (Hasad).

Ibn al-Qayim dijo: “Todo aquel que transmita el Mal de Ojo es celoso, pero no todo aquel que sea celoso transmite el Mal de Ojo” y dijo también: “Este comienza cuando a una persona le gusta algo, entonces su ego se posa en ese asunto, y al estar continuamente mirando a la persona que posee lo que lo hace sentir celos, esta persona dirige su odio hacia ella. También se puede hacer el Mal de Ojo a uno mismo o a otra persona sin intención de hacerlo porque es parte de su naturaleza. Este tipo de persona puede ser muy perjudicial. Los Juristas opinan que si alguien es conocido por tener esta cualidad la autoridad debería aconsejarle y apartarlo de aquellas personas a las que podría perjudicar. Esta idea es absolutamente correcta”. (Zaad al-Ma’aad, 4/167, de Ibn al-Qayim).

Un Hadîz dice: “A’udhu bi kalimaat-Illaah it-taamah min kulli shaytaanin wa haammah wa min kulli ‘aynin laammah (Busco que las palabras perfectas de Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) me protejan de todo Demonio (Satanás), Sabandija y de todo Ojo Envidioso)”. (Narrado por Al-Bujârî (3191) del Hadîz de Ibn ‘Abbas)

El significado de “Sabandija” (Haamah) hace referencia a animales o insectos letalmente venenosos.

El significado de “Envidioso” (Laammah) se refiere a aquello que cause daño a causa de los celos y envidia enfermizos (Hasad).

- En tercer lugar: Aunque es correcto decir que el Mal de Ojo proviene de personas que sienten Envidia (Hasad), también puede provenir de alguien que no tenga envidia sino que simplemente le guste algo, debido al siguiente Hadîz: “Quien vea algo en si mismo o dentro de sus posesiones o en las de su hermano que le guste, que ore para que sea bendecido porque el mal de Mal de Ojo”. (Narrado por Ibn as-Sunni en ‘Aml al-Yawm wa al-Laylah, p. 168; y por Al-Hakim, 4/216. Clasificado como Sahîh por Al-Albani en Al-Kalim at-Tayyib, 243)

Este Hadîz explica que una persona puede causarse daño a si mismo o a sus posesiones, y nadie siente envidia de si mismo, pero puede dañarse a si mismo con el Mal de Ojo por medio de la auto-admiración, entonces es probable que pueda dañar a su mujer de la misma manera.

Ibn al-Qayim dijo: “Un hombre llegó a transmitirse el Mal de Ojo a si mismo”. (Zaad al-Ma’aad, 4/167, de Ibn al-Qayim)

- En cuarto lugar: Un hombre puede dañar a su mujer con el Mal de Ojo con el hecho de mirarla y verla hermosa y admirarla, aunque no le diga “Eres hermosa”. Es Recomendable (Mustahabb) que diga: “Allaahumma baarik fihaa (¡Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala)! Bendicela)”.

Se informo de Abû Umamah ibn Sahl ibn Hunayf que su padre le dijo que el Mensajero de Al-lâh (Salallahu Alaihi Wa Salam) viajó con él hacia Meca hasta que llegaron a Shi’b al-Yazzar en la zona de Al-Yuhfah. Sahl ibn Hunayf se lavó, y era un hombre blanco y bien parecido. ‘Aamir ibn Rabi’ah, el hermano de Bani ‘Udayy ibn Ka’b, lo miró cuando se estaba lavando y dijo: “¡Nunca he visto algo así ni siquiera la piel de una virgen que vive en el retiro!”. (Esta fue una metáfora por la blancura intensa de su piel). Luego Sahl sufrió un ataque (un ataque similar a una epilepsia, y cayó al piso). Fue llevado ante el Mensajero de Al-lâh (Salallahu Alaihi Wa Salam) y se dijo: “Oh Mensajero de Al-lâh (Salallahu Alaihi Wa Salam), ¿sabes lo que le ha ocurrido a Sahl? Por Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala), no puede levantar su cabeza y no se despierta”. El dijo: “¿Acusan a alguien con respecto a él? Ellos dijeron: “‘Aamir ibn Rabi’ah lo miró”. Entonces el Mensajero de Al-lâh (Salallahu Alaihi Wa Salam) llamo a ‘Aamir y habló con él, diciéndole: “¿Alguno de ustedes quisiera matar a su hermano? Si ven algo que les agrada, ¿por qué no rezan para que sea bendecido?”. Luego le dijo (a ‘Aamir): “Bañate (Ghusl).” Entonces se lavó la cara, las manos, los codos, las plantas de los pies y dentro de su Izaar (prendas inferiores) con el agua de una vasija, luego el agua fue arrojada sobre el (Sahl), un hombre la derramó sobre su cabeza y espalda desde atrás de él, inclinando la vasija. Esto fue lo que le hicieron, luego Sahl se recupero inmediatamente y no mostró ninguna secuela. (Al-Musnad, 3/486. Al-Hayzami dijo: Los narradores de Ahmad son confiables (Sahîh). Al-Mayma’, 5/107)

- En quinto lugar: Cuando les gusta algo, algunos dicen “Ma sha’Allaah laa quwwata illa Billaah (¡Lo que Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) desea (sucederá)! No hay poder ni fortaleza salvo en Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala))”. Consideran como evidencia de esto una Aleya en Sura La Caverna y un Hadîz.

La Aleya en cuestión es la siguiente:

“Más te habría valido si al entrar en tu huerto hubieras dicho: Que sea lo que Al-lâh quiera, no hay poder sino por Al-lâh. Y si ves que tengo menos riqueza e hijos que tú…”. (La Caverna 18: 39)

Pero esto no es Evidencia (Dalil), porque el tema de la Aleya no tiene relación alguna con la Envidia (Hasad); en realidad, Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) destruyó su jardín debido a su Incredulidad (Kufr) y transgresión.

El Hadîz en cuestión fue transmitido de Anas ibn Mâlik (que Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) se complazca de él) diciendo que el Mensajero de Al-lâh (Salallahu Alaihi Wa Salam) dijo: “Quien vea algo que le guste y diga: “Ma sha’Allaah laa quwwata illa Billaah”, el Mal de Ojo no lo afectará”. Pero este Hadîz es Muy Débil (Da’if Yiddan). (Al-Hayzami dijo: Esto fue narrado por Al-Bazar de Abû Bakr al-Hudhali, que es Muy Débil (Da’if Yiddan) Mayma’ al-Zawaa’id, 5/21)

Y Al-lâh (Subhanahu Wa Ta‘ala) sabe más.